GTD: Gestionando la Atención a Múltiples Niveles
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Los idealistas creen que las cosas a corto plazo no cuentan. Los cínicos creen que las cosas a largo plazo no importan. Los realistas, en cambio, creen que las cosas que uno hace o deja de hacer a corto plazo determinan lo que sucede a largo plazo.
Sidney Harris
Hay muchos sistemas de organización y productividad personal centrados en «objetivos, valores y visiones» y también hay un sinfín de herramientas y colecciones de trucos para ser más productivos. Sin embargo, la única metodología que hasta ahora ha sido capaz de combinar ambos niveles en un todo común y con sentido ha sido GTD.
Esta metodología no sólo es innovadora por su enfoque eminentemente práctico y realista, sino también por la libertad que te ofrece para decidir la mejor forma de implantarla y con qué herramientas. Asimismo, GTD hace un uso intensivo de las técnicas de coaching, facilitando que puedas identificar qué tareas y proyectos son los realmente importantes, tanto a corto como a largo plazo, para alcanzar los resultados que deseas, así como los recursos de que dispones y las oportunidades que existen.
Preguntas como «¿Qué significa esto para mí?», «¿Qué resultado quiero conseguir con esto?» o «¿Cuál es el siguiente paso para que esto suceda?» tienen el poder de liberar tu creatividad y tus recursos haciendo que actúes de forma más inteligente, no porque GTD te haga más inteligente, sino porque te permite utilizar tu inteligencia de forma más efectiva.
GTD no es difícil; simplemente evita el camino fácil y simplista de otros planteamientos y técnicas porque entiende que la productividad personal es algo más que una colección de trucos efectistas. Para GTD la productividad personal es una competencia, es decir, una forma habitual de comportarse, y por tanto sólo la expresarás cuando hayas adquirido una serie de hábitos productivos.
El control que proporciona el método de los cinco pasos para gestionar el flujo de trabajo, combinado con la perspectiva que dan los seis niveles de enfoque, hace posible la integración real de las acciones a corto plazo con los objetivos a largo plazo.
Del mismo modo, el método de planificación natural de proyectos te proporciona un método integrado, flexible y coherente para pensar sobre los resultados que quieres alcanzar con cualquier proyecto y la forma de llegar a ellos, siendo uno de los elementos más potentes, y probablemente menos conocido, de la metodología GTD.
Tener claros los retos y el propósito de cualquier tarea que emprendes; ser capaz de «visualizar» el éxito antes de planificar cómo alcanzarlo; generar abundancia de ideas para tomar conciencia de las oportunidades y recursos a tu alcance; organizar todo ello transformándolo en componentes, secuencias y prioridades concretas y, finalmente, tomar decisiones y llevarlas a la práctica, es la esencia de la productividad.
Seguir hablando de gestión del tiempo a estas alturas es un sinsentido. Lo único que puedes gestionar es a ti mismo y, en concreto, tu atención. Y puesto que la productividad personal es una competencia, tampoco tiene sentido separar el ámbito personal del profesional. Cuando una persona es productiva, lo es porque sus hábitos son productivos, independientemente del lugar o la circunstancia.
Lo que a día de hoy necesitas para interaccionar de forma efectiva con tu realidad es una metodología que te permita gestionar tu atención a múltiples niveles de forma flexible; una metodología que te ayude a ganar perspectiva sin sacrificar control y en la que el control no te haga perder la perspectiva; una metodología que integre los imprevistos y las interrupciones como un componente más del sistema y, sobre todo, que te permita volver fácil y rápidamente al estado de equilibrio superado el momento de crisis.
La productividad personal hoy consiste en saber alternar con elegancia las 3 formas de trabajar, es decir, encontrar el equilibrio entre cuándo trabajar en un trabajo ya definido, cuándo trabajar en las cosas a medida que surgen y cuándo pararte a definir tu trabajo.
Por eso, hoy, más que nunca, necesitas GTD.
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