GTD: Los Beneficios de Recopilar
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Recopilar es una actividad que, con frecuencia, genera sentimientos contrapuestos las primeras veces que se lleva a cabo. Muchas personas, cuando recopilan por primera vez como parte de su iniciación a GTD, declaran haberse sentido fatal y, a la vez, muy bien. ¿Cómo es esto posible?
Lo que sucede es que, mientras llevas a cabo el proceso de recopilación al completo, tomas consciencia de todas las cosas sobre las que deberías haber tomado ya una decisión. Por ello, es relativamente normal experimentar algún tipo de ansiedad, como por ejemplo agobio, pánico, frustración o culpa.
Sin embargo, al mismo tiempo que sientes las emociones anteriores, se suele sentir también alivio o liberación, provocados por la sensación creciente de control que te produce ir enfrentándote, por fin, a todas esas decisiones largamente postergadas.
En contra de lo que puede parecer a primera vista, esos sentimientos negativos rara vez tienen su origen en causas objetivas, como podría ser, por ejemplo, tener muchas cosas por hacer.
Lo cierto es que casi siempre hay más cosas por hacer que tiempo para poder hacerlas todas así que, si te sientes mal por ello, me temo que nunca lograrás liberarte de esa sensación.
La buena noticia es que tener demasiadas cosas por hacer rara vez es el motivo real de los sentimientos negativos; éstos aparecen por otras razones.
Cuando alguien adquiere un compromiso contigo y no lo cumple, ¿cómo te sientes? Frustrado, defraudado, triste o enfadado suelen ser respuestas habituales. Se produce además otro fenómeno negativo, que es la pérdida de credibilidad por parte de la persona que incumple su compromiso. En otras palabras, cuando una persona incumple un compromiso, dejas de confiar en ella.
Algo muy parecido sucede cuando tú te comprometes contigo mismo a hacer algo y no lo cumples. ¿Recuerdas qué has sentido cuando en alguna ocasión has decidido hacer algo que querías y al final no lo has hecho? Probablemente los sentimientos sean los mismos que si hubiera sido otra persona quien hubiera incumplido su palabra: frustrado, agobiado…
Lo que sucede es que la mayoría de la gente adquiere constantemente compromisos sin ser siquiera plenamente consciente de ello. Lógicamente, si no sabe que ha adquirido una serie de compromisos, es difícil que pueda tenerlos bajo control y, menos aún, que sea capaz de gestionarlos.
Recopilar te devuelve la confianza en ti mismo porque te permite saber cuáles son tus compromisos, requisito indispensable para decidir qué hacer con ellos y llevarlo a la práctica.