Desarrollo Profesional: Coaching para el Crecimiento
|
2:02'
La semana pasada tuve la suerte de poder asistir invitado a un deminar organizado por BTS bajo el título «Coaching para el Crecimiento«.
Me gustó mucho la forma en que estaba organizado el deminar, ya que lo reducido del grupo favorecía tanto la agilidad de la sesión como la interacción entre los asistentes.
Hace ya tiempo que creo que la formación en formato «busto parlante + PowerPoint» es una pérdida de tiempo y dinero ya que, al margen de la calidad del curso en sí, lo aprendido se olvida en breve.
Lo que BTS aporta como elemento diferencial es lo que ellos denominan «Learning by Doing» o «Aprender Haciendo».
El hecho de usar programas de simulación, excelentemente producidos por cierto, hace que la experiencia de aprendizaje sea, por un lado, mucho más realista y, por otro, que su impacto y persistencia sean mucho mayores.
Esto no significa que no haya lugar para la interacción con otros compañeros asistentes al curso o que se renuncie a la explicación teórica de los conceptos, sino todo lo contrario.
Alternando explicación teórica con ejercicios en el simulador, podemos por un lado ver en qué medida hemos entendido y asimilado la teoría y por otro descubrir cosas nuevas con la práctica.
Me llamó especialmente la atención lo elaborado del simulador y las horas de investigación y trabajo que sin duda hay detrás del mismo.
Evidentemente esta solución de formación no va a convertir a nadie en un coach profesional de la noche a la mañana, pero ofrece en mi opinión un par de ventajas significativas a las organizaciones que decidan utilizarlo:
- Permite disponer de un benchmark interno sobre el nivel al que se encuentra la organización, y en especial los responsables de personas, en habilidades de coaching. Ello nos permitirá identificar acciones específicas para trabajar estas habilidades en función de cada uno de los niveles.
- Como herramienta individual de aprendizaje proporciona una visión muy precisa de las habilidades propias en materia de coaching, lo cual, de manera parecida a lo que nos suele ocurrir con los resultados de un feedback 360º, nos sorprenderá gratamente en algunos casos y no tan gratamente en otros.
Si añadimos que las soluciones de BTS son adaptables a la realidad y características de cada empresa, tenemos sin duda una opción digna de tener en cuenta cuando hablamos de formar y desarrollar a nuestras personas.
Aprovecho para dar las gracias al Dr. Philios Andreou, CEO de BTS para Iberia y Méjico, por su invitación.
DISCLAIMER: Este post expresa únicamente mis opiniones personales sobre BTS, sus personas y métodos y no las opiniones de mi empresa.
La única relación que me vincula con BTS es haber asistido a uno de sus cursos hace casi una década y haber sido ahora invitado al deminar objeto de este post. No existe por tanto forma alguna de relación comercial entre BTS y yo.